no se sentia con ganas de nada, afuera el cielo derramaba unas gotas pesadas, grises.
la calle estaba llena de bondis, era el unico espectaculo de colores que se podia ver aquel dia. maldito dia de lluvia- penso. y encima todavia la espera, apenas iban por el numero 390 y el llevaba el 700.
decidio que era una buena idea caminar, caminar siempre hace algo con el tiempo.
La Boca olia a milanesa. era como si en cada una de esas viejas fachadas hubiera una vieja cocina con una vieja cocinera friendo el pan rayado y el lomo entre azulejos y sartenes oxidadas. era el perfume del barrio.
b.
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